INDIGNACIÓN PETROLERA

PARO DEPARTAMENTAL PETROLERO

La Fuerte jornada de los trabajadores de la industria del petroleo logró mostrarle al país y al mundo los conflictos que se viven cotidianamente alrededor de este Recurso Natural.

En el marco del paro departamental convocado por la Unión Sindical Obrera (USO), debido al conflicto laboral que viven los trabajadores de CEPSA Colombia S.A. (CEPCOLSA) y TERMOTECNICA COINDUSTRIAL, pero sobre todo movidos por  las deplorables condiciones laborales de los trabajadores, la deuda social de las Empresas Transnacionales, la contaminación ambiental y el saqueo de los Recursos Naturales, la producción petrolera se paralizó el día 3 de octubre del 2012.

En esta dinámica, el Departamento del Meta despertó con un Paro Departamental que logró evidenciar las problemáticas que se viven alrededor de la explotación de los hidrocarburos. Así, los campos petroleros de Apiay, Chichimene, Castilla, Cabuyaro y el gigante Rubiales quedaron totalmente bloqueados. Claro está que los trabajadores no buscaron parar por parar, sino presionar a las Instituciones Estatales para lograr un diálogo entre Transnacionales, Gobierno y Comunidad, para solucionar los diferentes problemas que se presentan. Sin embargo, brilló el Gobierno por su silencio y la fuerza pública por su brutalidad.

La jornada petrolera presentó ataques de la fuerza pública en diferentes zonas del territorio departamental, entre las que resaltan las presentadas en Puerto Gaitán y la vereda el Alto de Pompeya. En Gaitán los trabajadores y la comunidad en general bloquearon el puente  Manacacías  resultando una persona herida producto del ataque del Escuadrón Móvil Anti Disturbios (ESMAD) a un conductor de un moto taxi al cual le partieron un brazo por llevar una camiseta con distintivos de la USO, cabe aclarar que esta persona no estaba en la jornada de protesta sino trabajando en su vehículo. En este punto desmentimos al Periódico Llano 7 días quien manifestó que el herido era producto de un  ataque con una piedra.  

Entre tanto, en la vereda de Alto de Pompeya, ubicada en el kilometro 26 vía Puerto López, se realizó la manifestación por parte de los trabajadores de la USO, Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y Asociación de Trabajadores de la Región Circunvecina de Apiay (ARCA) junto con los demás habitantes de las veredas que circundan el campo petrolero de ECOPETROL en la vereda Apiay en el municipio de Villavicencio, mostrando su INDIGNACIÓN con respecto a las condiciones laborales, ambientales y sociales negativas que ha generado la explotación petrolera por parte de ECOPETROL y las demás empresas que extraen y explotan nuestros recursos.

La manifestación pacífica y argumentada, tiene como sustento el pliego de peticiones construido por los mismos trabajadores, que consta de 18 puntos, en los que se exige el derecho a la negociación colectiva; el mejoramiento en los salarios que actualmente  son miserables y no corresponden a las elevadas ganancias del sector petrolero; la reparación de los daños ambientales y verdaderos planes de inversión social por parte de ECOPETROL y las empresas transnacionales.

De esta manera hace más de un año los trabajadores organizados vienen siendo perseguidos, criminalizados y despedidos injustificadamente por las empresas CEPCOLSA (España), TERMOTÉCNICA (contratista de ECOPETROL), PACIFIC RUBIALES ENERGY CORP (Canadá), quienes a su vez han creado sindicatos paralelos -es el caso de la Unión de los Trabajadores de la Industria Energética- que buscan deslegitimar las justas luchas de los trabajadores y  las comunidades circunvecinas a las explotaciones petroleras.

 Desde que inicio la hora cero del paro, hombres y mujeres empezaron a movilizarse a la avenida que atraviesa este sector, es decir la vía que comunica a Villavicencio con Puerto Gaitán, haciéndose más grande la movilización con gritos y consignas cada vez más fuertes y decididas. La respuesta del Estado colombiano  no se hizo esperar, y en lugar de enviar un funcionario que empezara a buscar salidas dialogadas a las diferentes problemáticas, movilizó más de 100 agentes del Escuadrón Móvil Anti Disturbios (ESMAD), para reprimir la justa protesta de los los trabajadores.

Frente a esta situación la comunidad no muestra intimidación y por el contrario su indignación empieza a crecer, al ver como estos Agentes de los adinerados de este país,  arremeten de manera violenta contra todos ellos. En cuestión de segundos, las fuerzas represivas del Estado, cubrieron con una cortina de humo, bombas aturdidoras y varios heridos lo que empezó como una jornada de protesta.  Ya a las 7:40 de la mañana, todo era un caos y algo que  causo impacto, y que los medios institucionales no pasaran por sus pantallas, fue un  un hombre que recibió cuatro impactos de balas de goma quedando asfixiado y tendido en el suelo, hasta que la comunidad le brindo ayuda.

Como consecuencia de esto el ESMAD ocasiono daños a las casas de la comunidad, tomándolas como trincheras para atacar la misma gente que habita en ellas, dañando vehículos, incendiando los potreros como consecuencia de los explosivos lanzados contra la comunidad entre los que más sobresalen. Como consecuencia para la comunidad quedo un pliego de exigencias incumplido, las casas de los habitantes del lugar averiadas, 5 detenidos entre ellos 2 mujeres y 3 hombres, personas que fueron maltratadas verbalmente y de manera física en el momento de la captura.

Finalmente, el balance es positivo para todo el pueblo trabajador del Meta, porque se logró evidenciar la problemática que se vive al interior, la capacidad de lucha del pueblo siguen en aumento y la deslegitimación del Estado es un hecho. Un Estado que una vez más demostró estar al lado de las ricos de la Nación y del planeta, que no representa los intereses del pueblo y el cual solo se sienta a negociar después de ser derrotado en las calles, que siempre será fruto de la organización y lucha popular.

PROCESO POPULAR GERMINA –VILLAVICENCIO-